Diana Pérez | MEDIOTIEMPO (Enviado)
Estadio Nemesio Díez, ante una buena entrada, domingo 9 de Mayo del 2010
- Toluca eliminó al América en la Liguilla, por cuarta ocasión en la historia
- Los Diablos enfrentarán a Pachuca en los Cuartos de Final
(Video: Isaac Castro | MEDIOTIEMPO)
América con la ausencia de Pável Pardo y Oscar Rojas, ambos por lesión, no pudo frenar el potencial ofensivo de un Toluca que manejó el balón y el encuentro a placer; el equipo llegó en un par de ocasiones buscando la fuerza necesaria para hacer daño, pero la figura de Daniel Márquez, como única punta, no distrajo ni atemorizó a los de casa.
Toluca alzó los brazos y festejó haber echado al América de la Liguilla por cuarta ocasión en la historia. En el otro bando no hubo lágrimas, sólo misterio por los tiempos venideros. Jesús Ramírez abandonó en solitario la cancha del Nemesio Díez tratando de visualizar su futuro, aunque hoy el panorama suena incierto, pues claramente Michel Bauer, Presidente de las Águilas, estableció que los proyectos sólo se pueden respaldar con resultados.
Para América llegarán unas largas vacaciones, para Toluca el enfrentamiento contra Pachuca en los Cuartos de Final.
EL PARTIDO
América lo sabía bien, en Toluca el equipo era importante, pero Sinha merecía una marcación especial porque es un hombre que distribuye y anota con calidad. Pável Pardo, Capitán de las Águilas, lo dijo en público y en el vestidor, advirtió que si el equipo de Coapa quería anular a los Diablos tendría que hacer un trabajo especial sobre su Capitán.
Pero sus palabras se fueron con el viento, Jesús Ramírez no pidió una marcación especial y en la cancha nadie se encargó de cuidarlo. Así Naelson pudo hacer de las suyas.
Saliendo desde atrás, como un diablo desbocado el mexiquense agarró el balón y se perfiló en repetidas ocasiones a la portería de Armando Navarrete, a veces lo hizo solo, a veces con la marca pegada, pero con igual soltura, hasta que entonces llegó su obra maestra.
Martín Romagnoli filtró la pelota al cobrar una falta que le habían cometido al naturalizado mexicano, Sinha aprovechó la oportunidad y con un derechazo hizo que el balón cruzara la línea de meta para así fundirse en un abrazo que parecía eterno, con el resto de sus compañeros.
El infierno ardió mientras América trató de buscar fuerzas y caminos pensando en la victoria; pero las Águilas con la incursión de Daniel Márquez, como delantero punta, perdieron peligro y presencia.
El delantero se dedicó a postrarse en el área o los linderos de ella esperando un balón a merced, mientras el "Rolfi" y Ángel Reyna, desde atrás, trataron de pisar con firmeza el área rival. Márquez logró recibir un par de esféricos, pero ante el comportamiento errático del delantero, tanto Reyna como Montenegro decidieron que lo mejor era terminar por su cuenta las jugadas.
Toluca con la seguridad que lo caracteriza tomó el balón y le puso el ritmo de juego al partido. Cuando quiso atacar lo hizo desdoblando cada línea, plantando a un equipo de Coapa que trataba de frenar a su oponente, pero no podía, no había argumentos sólidos para hacerlo.
Las Águilas trataron de ser un cuadro peligroso y contundente para pasar a las Semifinales, pero el esfuerzo fue en vano, porque ni Beausejour, ni Reyna ni "Rolfi", ni Sandoval lograron pesar; el equipo terminó entregando el partido desde la banca, pues aunque la entrada de Sandoval, al medio tiempo, le dio frescura y velocidad, cuando el estratega decidió sacar a Silva para meter a Esqueda, Reyna tuvo que dedicarse a labores de sacrificio, y olvidarse casi por completo de atacar.
Toluca entendió que había ganado el partido, que América no tenía para más y por ello cuando faltaban 14 minutos para que el duelo terminara decidió cuidar a sus figuras, ‘Sinha’ y Mancilla abandonaron la cancha, porque para ellos el futuro estaba por llegar, había que estar descansados para enfrentar al Pachuca a mitad de semana.
Al final, el timonel de las Águilas, desesperado por el triunfo, mandó a Martínez para ayudar por la banda derecha y sacó a López para quedarse con sólo un central. La partida estaba perdida, América se hincó pidiendo perdón por sus pecados, pero el Diablo no lo perdonó, lo castigó con desprecio y soberbia y terminó por clavarle una llaga al 89’ cuando Manuel Pérez metió el del 2-0.
EL ARBITRAJE
Francisco Chacón. Bueno. Sin problemas en las marcaciones, aunque América le reclamó en ambos goles. Sin embargo, el silbante se supo manejar con firmeza dentro de la cancha y no atendió a los reclamos, hasta el final manejó su postura y por ello expulsó a Reyna al minuto 89.
[MEDIOTIEMPO]
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